Vientos de cambio: El Gobierno presiona a los asambleístas de Gualeguaychú para que cese el bloqueo contra Botnia

Parecen muy lejanos los tiempos, en que, el ex presidente Néstor Kirchner declaraba en tono enérgico que la “lucha” contra Botnia era una “causa nacional”, eran momentos en que el Gobierno toleraba y alentaba en forma tácita, con su inacción, los cortes sobre los principales puentes tendidos sobre el Río Uruguay, que unen Argentina con Uruguay.

La negativa de Tabaré Vázquez de dar su apoyo a la candidatura como Secretario General de UNASUR a Néstor Kirchner, motivada en el rechazo del mandatario uruguayo al bloqueo del puente Gualeguaychú - Fray Bentos y a la posición condescendiente del Gobierno argentino durante más de un año, pareciese ser la gota que rebalsó el vaso de la paciencia kichnerista para con los asambleístas.

Vientos de cambio parecen estar soplando ahora sobre el Gobierno Nacional, ya que la postura adoptada ha dado un giro de 180º. La salida de Romina Picolotti de la Secretaría de Medio Ambiente en diciembre pasado, una ex abogada de los asambleístas de Gualeguaychú, por presuntos hechos de corrupción y gastos injustificados pareció ser la primer señal.

Luego vinieron la catarata de acciones y declaraciones en contra de los cortes de voceros oficialistas: Sergio Massa, Jefe de Gabinete no titubeó en afirmar que “perjudican a sus propios vecinos” y que “son malos”, mientras que Uribarri, Gobernador Entrerriano citó a los asambleístas para conminarlos a que cesen con los bloqueos ya que producen “tremendos costos y daños” a la provincia. Hasta el piquetero K, Luis D´Elía emitió su opinión contraria a los cortes diciendo entre otras cosas que es “un episodio terminado”, y que hay que “restablecer las relaciones con el Uruguay”. Agregó sobre Botnia que utiliza “tecnología de punta” y que los “capitales finlandeses son los más serios del mundo”. Se dice que el Gobierno ha mandado a hacer encuestas, no publicadas, que mostrarían que la mayoría de los argentinos (un 60% al menos) está en contra de la metodología del corte de pasos fronterizos. Desde Entre Ríos fuentes oficiales afirman que el apoyo local a los asambleístas cada vez es menor, y que el número de manifestantes se redujo al núcleo duro e intransigente, que está quedando cada vez más aislado.

Pese a estas presiones para que se levanten los bloqueos, los asambleístas de Gualeguaychú, reafirmaron que seguirán con el corte sobre el puente internacional Gral. San Martín y esperan sumar durante este mes a sus pares de Colón y Concordia para que realicen cortes en los otros pasos internacionales, con la intención de bloquear todo paso al Uruguay.

Asimismo los asambleístas acusan al Gobierno Nacional de ocultar datos sobre estudios realizados que indicarían que Botnia contamina. Vale aclarar que la Secretaría de Ambiente comenzó hace poco menos de un año a hacer estudios y monitoreos Cobn el fin de medir el posible impacto ambiental de la pastera finlandesa, pero nunca difundió los datos. Cabe preguntarse ¿Si hubieran mostrado que Botnia efectivamente contamina no hubiera jugado esa carta el Gobierno para hacerse fuerte en su reclamo frente a Uruguay? ¿No hubiera servido para crear una expectativa favorable y presionar mediáticamente a Uruguay y a la Corte de La Haya?

Este año, al igual que en Enero de 2008, la organización ambiental Green Cross, cuya cara principal es el ex presidente ruso Mikhail Gorvachov, publicó un estudio donde asegura que el aire de Gualeguaychú no sufre los efectos de los efluentes gaseosos de la planta. Los suspicaces preguntarán ¿Y sobre el Río Uruguay? Si bien esta ONG no se ha pronunciado, tampoco hay pruebas o estudios conocidos, de organismos serios y confiables, que demuestren que el río sufre contaminación desde los inicios de la producción de Botnia, en noviembre de 2007, a esta parte.

Por su parte cada vez se dilata más la pronunciación de la Corte de La Haya sobre el diferendo argentino – uruguayo. Hace una año se hablaba que para fines de 2008 se expediría, ahora se dice que será a fines de 2009 y otros pesimistas aseguran que sería en el 2010.

Los vientos de cambio parecen haber llegado para quedarse. El tiempo dirá si los asambleístas podrán mantener su postura intransigente ante las presiones de los gobiernos nacional y provincial, la falta de apoyo de buena parte de la población, y la falta de pruebas en contra de Botnia por hechos de contaminación. La estrategia gubernamental es la presión dialéctica y la instalación en la opinión pública de lo desaconsejable de los cortes, todavía no se hala de “pasar a la acción” y despejar a la fuerza el paso Gualeguaychú – Fray Bentos. Pero como dice la canción “cambia, todo cambia”.